Detrás de cada empresa, al frente hay una o varias persona con sus dificultades diarias. Por esta razón he procurado estar siempre atenta y alerta a las necesidades que los clientes demandan, convirtiéndome en la medida de lo posible en su más fiel consejera-asesora, para ayudarles a entender la legislación nacional e internacional en aquellos puntos que necesiten, y cumplir con todas las obligaciones legales, que en los momentos actuales, puedo afirmar son numerosas y de muy diferente índole.

Sobrevivir a la burocracia legal, a las obligaciones impuestas por el legislador, crear empleo y sacar adelante a una empresa, sea autónomo, persona jurídica o bien entidad sin ánimo de lucro, se ha convertido de unos años a esta parte “una misión imposible”. Las obligaciones, los impuestos, los costes salariales, los numerosos protocolos que ha de tener una empresa, hacen que cada vez necesiten de mayor atención y asesoramiento, en evitación de sanciones que les pueden obligar a cerrar el negocio y coartar su propio medio de vida y de los empleados que tenga contratados.

Es por ello que cada año, esta vocación, se enfrenta a mayores retos al momento de asesorar a clientes, intentando llevar a éxito un asesoramiento profesional, tan necesario y vital en los tiempos actuales.

La experiencia en el campo del Derecho Laboral, Mercantil y de la Movilidad Internacional, hacen que en todas las ocasiones  tenga que existir un vínculo muy cercano con el cliente, de tal manera que, de una sola mirada se puede percibir la estructura empresarial en toda su extensión, como un conjunto de obligaciones, las cuales hay que ser capaz de entrelazar y transmitir al cliente: por ejemplo como impacta un coste laboral, un contrato laboral, un desplazamiento en su cuenta contable de resultados…y prever y anticiparse a posibles futuros problemas, minimizando el riesgo de problemas desde el principio.

Me apasiona cuidar el detalle, los procesos, la personalización en cada uno de los clientes, establecer el contacto directo y continuo, para que sienta el cuidado y protección desde el primer minuto, con alegría, profesionalidad, serenidad, capacidad de trabajo y la sabiduría necesaria para saber como asesorar en cada momento y en cada servicio concreto.